EMBARAZO Y DRENAJE LINFÁTICO.
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Durante y
después de un embarazo, el drenaje linfático y el quiromasaje circulatorio de
las piernas, es un excelente aliado, para que muchas mujeres eliminen la
retención de líquidos, que en multitud de ocasiones se produce.
Embarazo y
parto, son dos momentos fisiológicos especiales en la vida de una mujer. Sin
embargo, como consecuencia de ello, muchas futuras madres se sienten algo frustradas
e inquietas, con el aumento de peso y la posible aparición de estrías y
celulitis durante el período de gestación.
Por descontado,
el drenaje linfático puede ser un gran aliado y ofrecer grandes beneficios a
las madres, durante el embarazo y en el postparto; no sólo estéticamente, sino
también favoreciendo su salud.
Siempre sin olvidar otras aspectos igualmente importantes, como llevar a cabo una dieta equilibrada y sana, ejercicio físico moderado, y distintos cuidados higiénicos-
dietéticos, como puede ser el cuidado adecuado de la piel, una mayor hidratación
o adoptar posturas adecuadas para descansar. Así como abandonar, cualquier hábito
tóxico previo: alcohol, tabaco…
Drenaje linfático durante el embarazo
Mientras
transcurre el embarazo, el cuerpo de la mujer retiene bastante líquido, como
consecuencia del aumento de la producción hormonal; responsable de varios
cambios estructurales y musculares. Algunas de estas hormonas son esenciales
para el embarazo y actúan reabsorbiendo sodio, que es uno de los máximos
responsables de la retención de líquidos. También los distintos cambios anatómicos
y fisiológicos, en el abdomen para albergar a ese futuro bebé, provocan que en
particular el sistema venoso (venas cavas, por ejemplo) sufran una cierta mayor
presión; dificultado el retorno venoso.
En estas condiciones, el cuerpo de la mujer embarazada sufre un aumento de entre el 30%y el 50% del volumen sanguíneo. En términos más directos, durante la gestación,
el cuerpo de la mujer retiene hasta 8 litros de agua más de lo normal. En
muchos casos este líquido está obstaculizado para ser metabolizado debidamente.
El quiromasaje circulatorio y el drenaje linfático ayuda a eliminar esos
líquidos y contribuye activamente a la recuperación de la salud física y
estética de la mamá.
Todas estas
maniobras, deben ser adaptadas a la anatomía y fisiología, de la mujer en este
momento; así como a la propia individualidad, ya que cada persona, cada mujer
es distinta, especial y única.
Drenaje linfático post-parto
Muy
recomendable después del parto (incluso en los partos por cesárea), dado que
como su objetivo es precisamente eliminar toxinas, desechos metabólicos y el
exceso de líquido, los resultados de esta técnica serán muy satisfactorios y
sobre todo si la mujer complementa el drenaje con una buena alimentación.
A pesar de los
múltiples beneficios, estas técnicas de masaje y quiromasaje están
contraindicadas en personas que sufran algún tipo de enfermedad relacionada con
el sistema linfático, en casos de insuficiencia renal, trombosis o aumento de
la probabilidad de ella, o en caso de hipotensión no controlada. Incluso en
estas contraindicaciones, habrá mujeres que podrán beneficiarse de todo esto,
siempre bajo la supervisión médica o de los profesionales debidamente
capacitados para ello. Siempre es importante no correr ningún riesgo.
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