LOS EFECTOS DEL ESTRÉS
Y OTROS ESTADOS EMOCIONALES EN EL SISTEMA DIGESTIVO.
estrés, ansiedad, nerviosismo, digestión, dolor |
En la entrada anterior valorábamos en general, como los estados emocionales, los sentimientos influían en nuestro sistemas gastrointestinal. Así que profundizamos un poco más en el tema...
¿Quién no ha
sentido alguna vez que se le cerraba el estómago después de un disgusto? ¿Alguien
ha tenido que salir corriendo al baño ante un estado de nervios importantes?
Ante una situación complicada ¿habéis experimentado náuseas?
Nuestro organismo
dispone de instintos básicos de supervivencia y, ante una situación complicada,
difícil y delicada, hay una serie de sistemas de la anatomía humana que no son
prioritarios. Uno de ellos es el sistema digestivo.
En eso no
somos muy diferentes a los animales y podemos decir que, ante cualquier
emergencia, peligro o situación estresante puntual; el cuerpo se prepara para
huir, mientras que deja en segundo lugar otras funciones como la digestión por
ejemplo.
Eso sí,
hablamos de situaciones puntuales en el tiempo. En los que vivimos una situación
de agobio y emergencia. Dura un tiempo y tiene un final. Pero si resulta, que
vivimos de forma continua en este estado de estrés, ansiedad, depresión;
nerviosismo mantenido es posible que suframos problemas digestivos porque el
cuerpo estará priorizando otras funciones vitales.
Hay distintas
emociones, sentimientos que nos afectan de forma similar. El estrés, estados de
excitación mantenidos, la tristeza, ansiedad, el enfado mantenido e incluso los
estados de ira.
Y como
siempre, al ser distintos y especiales; no todas las personas que sufren estas
emociones, mantenidas en el tiempo, padecen también problemas digestivos. Pero
quienes sí los sufren deberán tenerlos muy en cuenta para corregir ese
desequilibrio. En particular, si han tomado las medidas adecuadas a nivel
nutricional, y han acudido a los profesionales sanitarios para valorar otros
problemas físicos, propios del sistema digestivo. Es decir, sufren trastornos
psicosomáticos provocados por emociones o estados emocionales mantenidos en el
tiempo.
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Los problemas
gastrointestinales de origen psicosomático más habituales son los siguientes:
- Dispepsias o malas digestiones.
- Síndrome
del intestino irritable o colitis.
- Gastritis.
- Hernia
de hiato.
- Úlceras
gástricas.
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