lunes, 27 de octubre de 2014

VIBRACIONES. TERAPIA CON SONIDO ¿PODRÍA EN UN FUTURO BENEFICIARNOS? (1)

VIBRACIONES. TERAPIA CON SONIDO ¿PODRÍA EN UN FUTURO BENEFICIARNOS? (1)

hipnosis, hipnoterapia, estrés, relajación

         El principio de lo que conocemos y de lo mucho que todavía, probablemente; se escapa a nuestra percepción, investigación y tecnología, es la vibración.

         Desde la partícula más pequeña de un átomo hasta la inmensidad del Universo encontramos, frecuencias vibratorias en constante movimiento. Con distintos rangos de frecuencias, rangos, amplitudes; hacen que estos átomos tomen una disposición u otra.

         Así que dependiendo del ritmo de información vibracional, un átomo puede formar parte de una célula o de un cristal de cuarzo… La ciencia aporta evidencias claras en lo referente al poder del sonido, sobre la configuración y transformación de la materia. Así que, por qué no, establece un fundamento para aplicaciones terapéuticas y curativas.
         Sabemos que cada átomo está formado por un núcleo y un electrón o varios que giran a gran velocidad alrededor del núcleo. El movimiento de giro de los electrones origina un ritmo, compás o cadencia que crea una onda. Cuando coexiste una determinada cadencia, onda y forma, se producirá sonido.

         Retomando esas aplicaciones curativas y terapéuticas, de la vibraciones; en particular del sonido, en anteriores entradas hablábamos de cómo podíamos influir en las propias ondas cerebrales. A través de la audición, de lo que oímos. 

hipnosis, hipnoterapia, estrés, relajación

         Está demostrado científicamente e investigado, que podemos influir en estas ondas cerebrales, principalmente a través del sentido del oído. Podemos fomentar ondas que nos relajen, que calmen el estrés, que eviten la ansiedad o que mitiguen el dolor.
         Nuestro cerebro, para interpretar un sonido, conjuga, mezcla; la información que le llega de ambos oídos. Que suele ser diferente (salvo cuando estén equidistantesde la fuente), porque ambos oídos están físicamente separados entre sí por la cabeza. Esta diferencia en la situación de los oídos es la que le permite al cerebro localizar la fuente sonora.

                       En el sistema auditivo la sensación tridimensional está relacionada con la diferencia de amplitud y tiempo que recibe cada oído. Es decir, la localización de los sonidos en el espacio se consigue con el procesamiento por separado de la información de cada oreja y con la posterior comparación de fase y nivel entre ambas señales.


         A través de distintos sonidos o tonos, podemos conseguir que el cerebro se "sincronice" con determinadas ondas, promoviendo distintos estados. 


MÁS ENTRADAS:








No hay comentarios:

Publicar un comentario