TERAPIA VIBRACIONAL, TERAPIA CON SONIDO (3).
MENTE, CUERPO Y ENERGÍA
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| vibración, energía, estrés, ansiedad, depresión |
Actualmente y
cada vez con más frecuencia, se demuestra científicamente las propiedades de
trasformación del sonido cuando entra en contacto con nosotros. Estudios como
los del Dr. Masaru Emoto, Fabien Maman, J. Goldman, entre otros; confirman las
cualidades y actitudes trasformadoras del sonido.
Debemos
entender que el organismo humano, como las vibraciones sonoras, son
configuraciones energéticas estructuradas, y que pueden relacionarse mutuamente.
Así tenemos que, desde una visión estructural y biológica,
el organismo es un conjunto de partes o elementos resonantes.
Cada órgano,
víscera, tejido, músculo y hueso…; posee un tipo de vibración, se encuentra
resonando en una determinada frecuencia; conformando un conjunto, en nuestro
cuerpo con una compleja frecuencia sonora. Podemos decir que en un estado de
equilibrio, suena como una orquesta perfectamente afinada.
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| vibración, energía, estrés, ansiedad, depresión |
En esta teoría
se basarían los conceptos de chakra (punto energético básico) o por ejemplo de
aura (cada banda de frecuencia del propio campo electromagnético.
Estos puntos y
campos de energía, son de gran importancia al igual que el cuerpo físico; y
están íntimamente relacionados. Por ello, cualquier frecuencia vibracional,
sonido cercano al organismo humano originará un cierto cambio físico; afectandoa los campos electromagnéticos.
Cuando
conseguimos una sintonía, podemos sanar y transfornarnos, por qué no.
Por tanto,
tenemos un cuerpo físico formando una unidad con esas energías, vibraciones,
frecuencias; que han sido llamadas los cuerpos sutiles. Nuestros pensamientos y
emociones negativos, cargados de información vibracional; adoptan una forma
densa, disonante, con dificultad al equilibrio. Son patrones de energía con
frecuencias disarmónicas en nuestros campos etéricos.
Son estos
patrones cristalizados, que penetran en nuestros sistemas corporales; y se
terminan por manifestar en el cuerpo físico. Tenemos el ejemplo del estrés, la
ansiedad, la depresión… El sonido, las vibraciones; son capaces de disolver
estas cristalizaciones o energías potencialmente dañinas, mucho antes de que
lleguen al cuerpo físico. Con lo cual podemos decir que el sonido es la
medicina preventiva en su estado más puro.
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