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| ansiedad, estrés, relax, relajación |
YO DIVAGO, TÚ DIVAGAS, ÉL DIVAGA… (1) SOBREVIVIR AL ESTRÉS Y ANSIEDAD.
En otras ocasiones, he aprovechado algunos de los post, elaborados en un grupo de Filosofía de Facebook: "Héroes del Pensamiento". Con el hilo conductor relacionado con el estrés, ansiedad, depresión, así que aquí comenzamos de nuevo.
Además de la
multitud de las labores propias de cada día (coloquialmente suelo llamarlas
"propias de mi sexo" padre, cocinero, arreglatodo, limpiador,
chófer…), y de esa especie de cuadernos de bitácora mental en el que reflejo lo
vivido estas jornadas; intento alimentar esa insaciable sed de aprender nuevas
cosas, de conocer más los temas que me llaman la atención. Y claro, entre
ellos, abordar positivamente el estrés, la ansiedad, la depresión.
Esa sed, esa
curiosidad, hace que abra distintos grifos; que parecen deseosos de dejar de
estar ocluidos. Así que ante el mínimo roce en la válvula, destilan borbotones
de conceptos, ideas, trabajos, estudios, valoraciones…, en plan catarata que
después es difícil restañar.
Ante tamaño
chorro de datos e información, suelo dejar inconscientemente que la mente
"picotee" y divague, ya que soy consciente de que el intelecto (por
lo menos, el de mi menda) es incapaz de absorber con provecho todo. Además es
complicado distinguir el grano de la paja. Por lo que revoloteo de dato en
dato, hasta que el pensamiento; no sé por qué desconocidos mecanismos, emite un
pequeño flash que me estimula a comprender mejor lo que estoy viendo. En resumidas cuentas, me dedico a divagar, que es bonito, barato, y quita estrés.Y el hecho de que hable de estas elucubraciones, puede hacer que alguien se sienta reflejado en ellas y encuentre una clave positiva para sí, o para algún ser querido. Ya sé que en ocasiones, me repito demasiado; pero cuando alguien tiene
un problema de esta índole (estrés, depresión, ansiedad) el último en asumirlo
es él mismo. En uno de los comentarios de Sera, nos hablaba de la dura
situación personal de Descartes, y como; a pesar de todo utilizaba esa energía
negativa, transformándola en positiva al meditar.
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| ansiedad, estrés, relax, relajación |
Soñar con los
ojos abiertos, divagar, en mi caso suele potenciar la creatividad y me ayuda a
relajarme, sobre todo si estamos en un ambiente estresante y/o aburrido. Y por supuesto, hay expertos que consideran
todo lo contrario, como una causa de infelicidad; al dejar que la mente escape
de la realidad que nos rodea. Desde luego, nunca llueve a gusto de todos.
Uno de esos
chispazos los provocó una especie de noticia, una cabecera de esas de grupos de
noticias, que luego te vuelven loco y acaban la paciencia, intentando conocer
de dónde ha salido. Decía que la
depresión es uno de los trastornos mentales más frecuentes en nuestra sociedad,
tanto es así que afecta a más de 350 millones de personas en el mundo y se
estima que causa unas 850.000 muertes anuales. De hecho, el principal problema
radica en que más de la mitad de las personas no se somete a tratamiento por lo
que da rienda suelta a las ideas suicidas. No pude llegar a la base de la
noticia, y aunque no se realmente si los datos son precisos y en que estudios
estadísticos se basan, subjetivamente me parece válida. Si ya de por si, el número
de afectados, de autolisis, es muy apreciable; pienso no sólo en eso, sino en
el número de autolesiones no letales, de situaciones límite, de vidas
truncadas, de familias y parejas rotas… Este problema no solo afecta a la
persona deprimida sino también a quienes le aman y comparten su día a día. A
las relaciones sociales, laborales, económicas, morales…, que interfiere,
corrompe y anula.
Me hace pensar
en incomprensión. La incomprensión, frialdad, apatía; que esa persona afectada, encuentra a su
alrededor. Que contribuye a agravar síntomas, la desesperanza y la sensación de
soledad. Y el pensamiento llega a iluminarse como un árbol navideño ante el
flujo informativo en el que navego.
A menudo,
quienes rodean a la persona deprimida, tienen una visión errónea de este
trastorno. Piensan que se trata de un problema de carácter, que se puede
superar simplemente con la fuerza de voluntad. Vamos como dejar de fumar o algo
parecido. Culpabilizando incluso más al que sufre al no tener la suficiente
fuerza de voluntad. José, en el post de esta semana, produjo un relámpago de
interés como siempre. El desconocimiento, el miedo, la intolerancia, la deshumanización, la ignorancia, incluso el desdén; lo encontraba en la turbia mirada de muchos semejantes que contemplan a una persona con una enfermedad incurable, crónica o treméndamente dura. Todo esto es extrapolable en el caso
de estrés fuerte, ansiedad y/o depresión. ¿y en cuántos aspectos más de la
convivencia diaria, diría yo?
Y venga,
artículo va, estudio viene, libros escritos, obras en desarrollo, periódicos, blogs
y webs repletas, televisión, situaciones que nos cuentan o contamos, que vivimos
en primera persona o no. Pero ¿cómo leches habrá tantos datos y no logremos
comprender en realidad lo que siente esa persona?¿Tan difícil es ponernos en el
lugar del otro y tener una perspectiva realista de estos trastornos.
OTRAS ENTRADAS:
PASIÓN VS FRUSTRACIÓN (2) SOBREVIVIR AL ESTRÉS
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